dime la verdad
que se esconde
tras los sueños.
Dime que sé nadar,
que no me hundiré
en tus recuerdos.
Enséñame a flotar,
a navegarme,
sin perderme luego.
Háblame de tu brújula,
esa que marca el norte
de tus vientos.
¡Quiero ser tu capitán!
Tu general, tu marinero.
Lo que tu quieras lo seré.
Tan sólo...
acompáñame en el intento.
Tienes una verso sencillo, ligero y precioso.
ResponderEliminarCarmen, sirenas