No quiero palabras vanas,
vacías y esclavas.
Que pretenden decir todo
pero no me dicen nada.
Que son fruto de la división
que reside en las almas.
Quiero hablar en silencio
de lo que somos,
sin decorados ni patrañas.
Quiero ser tú, ser yo,
sin distinciones mundanas.
Ser este instante,
eterno, completo,
viviendo mi enseñanza.
Decir adiós a compromisos,
a ilusiones baratas.
Vivir en plenitud
lo que el momento traiga.
No deseo más,
no deseo menos,
que el universo en mí se expanda.
Liberarme de creencias
justificando una causa.
Yo estoy aquí contigo,
conmigo, con quien haga falta.
Me reconozco, me amo,
amo lo que acontece,
sin que los juicios valgan.
Y desde este amor que me posee
mi corazón te abraza.
Dejad de vivir la muerte,
el miedo que os atenaza.
Volved a ser los dioses
de la plena confianza.